La aplicación, creada a inicios de 2010 se ha expandido más allá de lo pensado, superando a la mayoría de los sistemas de mensajería, convirtiéndose en una red social usada por todas las edades. Es multiplataforma, gratuita, expansiva, permite compartir todo tipo de imágenes, textos, videos, audios, documentos, trabajar en grupos, crear listas de difusión, realizar llamadas de voz y videollamadas e incluso funciona en computadoras.
Con estudiantes
Puede constituirse en unos de los soportes para trabajar en el M-learning (mobile learning- aprendizaje móvil) e incluso facilita el trabajo de la clase invertida.
Cuando planificamos proyectos, se pueden crear “Grupos colaborativos”, con el docente cumpliendo – o no- el rol de moderador, y estableciendo reglas claras de trabajo (horarios – vocabulario – extensión del texto – en función de la edad y nivel de los estudiantes).
Se pueden compartir materiales, acordar y co-construir nuevos saberes, aprovechando las posibilidades multimediales de las que disponen los dispositivos móviles (audios, videos, imágenes, textos).
Con estrategias adecuadas potencia la construcción activa y colectiva de saberes, al constituirse en un repositorio de material alternativo para las clases, además de desarrollar la expresión y comunicación escrita. Puede constituirse en un promotor del pensamiento crítico proponiendo preguntas o situaciones prolemas que generen debate, diálogo y argumentación antes o después de la presencialidad, durante un tiempo definido, aprovechando la ubicuidad .
Otras estrategias interesantes son, trabajar entre grupos intercursos o interinstitucionales (ideal para lenguas y culturas extranjeras), la creación de pequeñas “video-clases” o “audio-clases”, infografías para adelantar o sintetizar un tema, constituyendo una verdadera comunidad de aprendizaje.
Con las familias
Whatsapp puede ser un medio de comunicación fácil, directa y sencilla ante contingencias, avisos de última hora, información relevante institucional, o por curso. Como en cualquier red social las reglas de “netiqueta” deben estar planteadas desde un inicio.
Es importante generar un vínculo de confianza para que sientan que este medio de comunicación con la institución es válido y recordar siempre la finalidad, posibles temas a tratar y tipo de archivos a enviar. No es un grupo informal o de amigos, todos forman parte de la comunidad educativa.
Para la gestión
Enmarcado en los acuerdos institucionales, el Whatsapp puede constituirse en una herramienta de ayuda para la gestión educativa. Permite generar alertas inmediatas dentro del equipo docente, mejorar su coordinación y sensación de cercanía. Se puede utilizar recordar reuniones, fechas límite de diversas tareas, agilizar la generación de propuestas, su puesta en común y la toma de decisiones de cara a plantear actividades integradoras como festivales, actos, salidas escolares, proyectos transversales.