El Ministerio de Economía, Infraestructura y Energía junto a la Dirección General de Escuelas pondrán en marcha un programa para incorporar frutas mendocinas a las meriendas escolares.
En dos semanas más, la prueba piloto comenzará en cinco escuelas del Sur provincial, cuando se incluyan en la ración alimentaria frutas desecadas que elaboran unos 70 pequeños productores nucleados en una asociación de Real del Padre.
La iniciativa surgió con el propósito de reforzar la merienda que se les entrega a los alumnos en las escuelas y con el fin de que los chicos empiecen a incorporar la ingesta de estos productos que “son apreciados en otros mercados pero no así en el consumo interno, como es el caso de la ciruela seca”, sostuvo Martín Kerchner, ministro de Economía, Infraestructura y Energía.
“La idea es empezar con algunas escuelas y hacerlo escalable en función de que los agricultores vayan sumando mayor producción, mientras los chicos empiezan a incorporar a su dieta estos productos que tienen buena calidad y muchos de ellos se exportan”, sintetizó Alejandro Zlotolow, subsecretario de Agricultura y Ganadería.
El objetivo es que el programa empiece con éxito en una escala que permita manejar cuestiones operativas como la logística para la distribución de productos y el tratamiento de los alimentos. Una vez que el sistema esté aceitado se podrán sumar más raciones, más establecimientos educativos y más productores interesados en proveer la mercadería.
Los productores son también objeto de este programa, ya que al promover el consumo interno, más allá de las posibilidades que la fruta tiene en el mercado externo, toma impulso la inversión para mejorar la cantidad y calidad de la producción
“Estamos impulsando a que los productores puedan proveer estos alimentos y así aumente la viabilidad comercial diversificando las posibilidades de colocación de su producto”, indicó Kerchner.
La asociación de pequeños productores de Real del Padre viene trabajando en distintos programas hortícolas con el fin de mejorar su producción. Luego de recibir asistencia a través del Programa de Desarrollo Rural Inclusivo adquirieron tela antigranizo para empezar a desarrollar con mayor eficiencia la horticultura. Además, adhirieron a los Programas de Mejora Competitiva frutícola para recibir asistencia técnica y crediticia apostando a la mejora competitiva.
“Los hemos orientado en la producción, los asistimos técnicamente y ellos han respondido haciéndose eco de estos planes, han hecho capacitaciones en cuanto a siembra y prácticas agrícolas. Ahora estamos trabajando en la modalidad de comercialización y esta es una de las herramientas que hemos utilizado para la apertura de mercados”, cerró Zlotolow.
Fuente: Ministerio de Economía, Infraestructura y Energía