Se trata de un trabajo conjunto entre Infraestructura Escolar y la Coordinación de Educación Técnica y Trabajo, donde los estudiantes de los últimos años en orientaciones de construcción realizarán relevamientos edilicios en las escuelas de la provincia.
Casi 1.000 estudiantes del último año de secundarias técnicas de la provincia relevarán el estado de los edificios escolares. De este modo, además de cumplir con sus obligaciones curriculares, los alumnos harán sus prácticas profesionales, herramienta indispensable para cuando tengan que comenzar a vincularse con el mercado laboral.
La iniciativa impulsada en conjunto por Infraestructura Escolar y la Coordinación de Educación Técnica y Trabajo permitirá al primer organismo sumar personal idóneo en la materia, que colaborará con el equipo de inspectores profesionales que ya tiene el área y que releva a diario el estado edilicio de los establecimientos educativos de la provincia.
El subsecretario de Infraestructura Escolar, Carlos Daparo, destacó la importancia de esta iniciativa y evaluó que “traerá muy buenos resultados para nuestro trabajo cotidiano, que es el mantenimiento y las reparaciones de las escuelas. Contaremos con más inspectores y podremos cubrir las necesidades de manera más rápida y eficiente”.
Daparo también resaltó la oportunidad de que “con estos relevamientos e informes, los alumnos nos ayuden a diseñar un modelo único de construcción de escuelas en la provincia y que se mantenga en el tiempo. Esto nos permitirá tener edificios estandarizados para luego poder intervenirlos de manera más eficiente”.
Por su parte, la coordinadora de Educación Técnica y Trabajo, Laura Quiroga, también puso énfasis en la trascendencia de esta acción concreta para los alumnos de escuelas secundarias técnicas. “Creemos que estas prácticas profesionales les servirán a los estudiantes para tomar experiencia antes de que se reciban, con un trabajo de campo específico, donde pueden poner en práctica toda la teoría que han ido incorporando a lo largo de su trayecto escolar. Además, serán evaluados y lo usarán como un plus para terminar sexto año mejor formados aún”.
Quiroga también adelantó que estas prácticas profesionales y prelaborales podrían extenderse a otros rubros en otras escuelas técnicas de Mendoza. “Es una herramienta que vamos a aplicar en establecimientos con otras orientaciones pedagógicas. A los alumnos les sirve y los entusiasma hacerlas”, indicó la funcionaria.
La experiencia que vivieron Marcos, Luz y Abril, tres futuros maestros mayores de obra
En esta oportunidad, las prácticas de los alumnos se realizaron en la escuela técnica Julio Krause, de Luján de Cuyo, donde Marcos, Abril y Luz, estudiantes de sexto año de la escuela Ing. Carlos Fader, aspirantes al título de maestro mayor de obra, hicieron un exhaustivo relevamiento de las instalaciones del establecimiento ubicado en el barrio Beghín, de Carrodilla.
Los jóvenes revisaron el estado del edificio, sus planos, sus espacios. Y luego, con esa información, realizarán un informe que, por un lado, les permitirá sumarlo a su carrera y también colaborará con Infraestructura Escolar para conocer un panorama más preciso del estado edilicio de la escuela.
“Para nosotros es algo increíble hacer este tipo de relevamientos. Nos sirve para lo que queremos ser. Es sumar experiencias antes de recibirnos, algo que muchas veces no se encuentra en el aula. Nos van a evaluar y de esta manera podremos aprobar nuestras materias. Nos parece una iniciativa muy importante y valiosa”, señaló Abril luego de haber terminado su tarea.
Fuente: Prensa Gobierno de Mendoza