Ya se desmontó la antigua cubierta y se comenzaron a colocar las chapas de zinc en el establecimiento. También se retiraron cielorrasos. La obra, que tendrá una inversión superior a $5,5 millones, presenta un progreso del 40%. Los trabajos estarán terminados a mediados de 2017.
La Subsecretaría de Infraestructura Social Básica continúa con el remplazo definitivo de toda la cubierta de techo de la Escuela 1-055 Corrientes, de San Martín. La obra, muy esperada por la comunidad educativa, ya presenta 40% de avance y se prevé que concluirá a mediados de 2017.
La empresa encargada de los trabajos ya desmontó todas las tejas de estilo colonial que cubren todo el techo del emblemático establecimiento y por estos días comenzó a colocar la chapa de zinc que remplazará a la antigua cubierta. Además, terminó de retirar los cielorrasos, que también presentaban un desgaste importante debido a la antigüedad del edificio.
A estas tareas se sumó la reparación integral de todo el sistema eléctrico de la escuela, dado que ha sufrido el paso de los años y la incidencia de las lluvias y requería una urgente intervención para que el inmueble funcione a pleno.
Según consta en los pliegos, los trabajos tienen un plazo de ejecución de seis meses y, en primera instancia, demandarán una inversión oficial superior a $5.500.000. Los recursos que se utilizarán para financiar las tareas provendrán íntegramente del presupuesto provincial.
De esta manera, la Escuela Corrientes tendrá nuevo techo y sistema eléctrico y habrá hecho realidad una obra dilatada durante más de cinco años desde que la cubierta comenzó a presentar serios problemas de filtraciones, a raíz de las lluvias.
El objetivo de Infraestructura Social Básica es que docentes y alumnos puedan contar con las flamantes refacciones a mediados de 2017, pero una gran parte del inmueble podrá funcionar desde el mismo inicio del ciclo lectivo, los primeros días de marzo.
“Hemos alcanzado casi 40% de avance y estamos muy confiados de que la obra continuará a paso firme hasta su conclusión. La comunidad educativa tendrá que convivir con los trabajos, pero luego los disfrutará”, indicó el subdirector de Mantenimiento y Reparaciones de escuelas, Emilio Pastorino.
La importante obra en la Escuela Corrientes contempla un recambio de 1.900 metros cuadrados de cubierta de techo (antiguamente, de tejas coloniales y entablonado de madera) por una estructura más liviana compuesta por chapa de zinc enmalletada, hierros y aislantes. Además, está previsto el remplazo de la totalidad del cielorraso suspendido por otro de yeso.
Mientras dure la obra, los alumnos no serán trasladados a otro edificio, dado que las tareas se harán por tramos y se tomarán todos los recaudos de seguridad para aislar a los chicos y docentes de los trabajos.
Fuente: Prensa Gobierno de Mendoza